A unos 3 kms al Sureste de Solosancho (Ávila) se levanta el poblado fortificado de la Edad del Hierro conocido con el nombre de El Castillo o "Ciudad de Ulaca".
El oppidum estuvo rodeado de una potente muralla que encierra una superficie ovalada de más de 60 Ha. En el interior -aunque faltan excavaciones arqueológicas -se ven las cimentaciones de piedra de casas cuadradas y rectangulares, más de 250, aparentemente en buen estado de conservación. Además destacan como elementos excepcionales: un santuario y altar rupestres, una sauna iniciática labrada en el granito, dos canteras, al Oeste y Suroeste, de las que se extrajeron bloques para la construcción de las viviendas y de la muralla y un gran edificio construido con mampostería casi ciclópea.
_castros/6/foto03.jpg El poblado se articula en torno a dos grandes vaguadas que lo atraviesan de Este a Oeste. El caserío es disperso, con casas siempre aisladas, que se distribuyen adaptándose a la topografía sin una ordenación en calles. La conservación de las ruinas -por no haber existido reocupaciones posteriores -es muy buena y la distribución actual de estructuras refleja más o menos la real en la Edad del Hierro.